jueves, 4 de febrero de 2010

Un nuevo proyecto ¿destinado al fracaso?

No me gustan las presentaciones. No se me dan bien. Además, me parecen innecesarias. En una presentación no se puede sintetizar todo lo que soy y lo que pretendo con este blog. Aborrezco las presentaciones y, sin embargo, siempre las hago. Para mí, las presentaciones son como las listas de cosas por hacer, o de cosas que me gustan o que odio. Las veo absurdas, pero constantemente me recuerdo que debería empezar una de cada. Seguramente las dos primeras serían interminables, pues son muchas las cosas que me gustan y quiero hacer. De todos modos debería escribirlas, porque cada vez que me registro en una página web me piden que describa mis aficiones, gustos y películas favoritas, y nunca me acuerdo de cuáles son. La última lista -la de cosas que odio- sería menos extensa, porque pocas cosas tienen el poder de despertar abominación en mí. Por no decir ninguna.

Además, y siguiendo con el tema de las presentaciones, no creo que este blog pueda interesar a nadie. Así que, si estás leyendo esto, te recomiendo que le des a la crucecita roja que tienes arriba a tu derecha -no sé si en los MAC funciona así también, pero bueno- y dedícate a algo más fructífero e intelectual. De mis diarios virtuales no suele salir nada provechoso. Normalmente los abandono a las tres entradas. Tuve uno hace tiempo que me duró varios años, pero al final lo tuve que cerrar -si aún sigues ahí, sí, has leído bien: lo tuve que cerrar-. Creo blogs cual perro semental que se lo va montando con todas las hembras del lugar: dejo mis semillitas en Internet y a los dos días ni me acuerdo en qué servidor parí tal criatura.

Pero creo que éste va a ser diferente, ¡sí!, por fin voy a conseguir mantener un blog durante, al menos, un mes. Ése va a ser mi periodo de prueba. Si lo supero significará que soy constante, disciplinada, aplicada y tenaz. ¡Eso son un montón de cosas que quiero ser!

Además, si quiero ganarme la vida escribiendo tendré que practicar, que he perdido el hábito. Y, quizá, imaginar que alguien está leyendo mis observaciones diseccionadas diarias -o semanales, que tampoco vamos a empezar tan fuerte- podrá ser un aliciente para que este proyecto se salve de la fosa común virtual donde descansan todos mis diarios olvidados.

I.

2 comentarios:

  1. Eeeeeeeeeh! yo lo he leído... xDD también estrené blog hace poco ( el mío sí es el primero) y al hacerlo, lo primero que pensé fue en , pasara lo que pasara, no abandonarlo. Cómo bien dices, deberemos acostumbrarnos, parece ser que es lo que nos tocará en un futuro: escribir. =)

    ResponderEliminar
  2. Dios Irene, ¿cómo se puede ser tan crack? Jajaja
    De verdad, deberías dedicarte a contar tu vida enserio como lo haces y ganarías una pasta de monologuista xDDDDD

    ResponderEliminar